El 74% de los centennials cree que su generación tiene el poder de cambiar las prácticas de las marcas para mejor, según un reciente estudio global de McCann.
Creativos, dueños de toda una plétora de recursos y dispuestos a dejar su particular impronta en el mundo, los centennials llevarán de manera impepinable las riendas del futuro. Y eso que el presente de la Generación Z se ha visto fuertemente baqueteado en el transcurso del último año como consecuencia de la pandemia del coronavirus.
De acuerdo con un reciente estudio de McCann, que puso bajo la lupa a más 32.00 centennials procedentes de 26 países diferentes, en el actual y turbulento contexto el 58% de la Generación Z considera de vital importancia que la verdad (a la que las «fake news» ponen una y mil piedras en el camino) sea el eje en torno al cual pivoten todas las cosas.
El 40% de los centennials asegura que ha reconsiderado aquello que le hace feliz durante la crisis del COVID-19. Y el 24% argumenta que una las pocas cosas positivas emanadas de la pandemia es que se tradujo en sus inicios en toneladas de «memes» muy buenos.
Cazadores ávidos de «memes» en las redes sociales, los jóvenes adscritos a la Generación Z no se cansan tampoco de buscar tendencias de nueva hornada. No en vano, el 60% de los centennials admite estar siempre a la búsqueda de «the next cool thing».
El rol de los centennials como «culture makers»
Lo que parece claro es que la Generación Z tiene el ánimo de derribar muros en el plano cultural y, valiéndose de las múltiples plataformas digitales a su disposición, tiene intención asimismo de hacer trizas el «statu quo». El 70% de los centennials considera que la mejor manera de alumbrar ideas creativas es reunir a grupos de personas dispuestas a observar y pensar de manera diferente.
Lejos de estar lastrados por cierto aborregamiento en sus acciones (como creen falsamente algunos), los más jóvenes otorgan muchísimo valor a la innovación, la creatividad y la autenticidad. Por eso el 59% de la Generación Z considera que la gente debería poder ser libre de expresarse tal y como desea.
Tan conectados como profundamente solos
Por otra parte, y pese a que los centennials se han criado a los pechos de la tecnología y las múltiples posibilidades de conexión a ella solapadas, el 66% confiesa que siete solo aun estado rodeado de sus amigos y familiares. Y no solo eso. El 76% de la Generación Z coincide en señalar en que las conexiones emocionales son hoy por hoy más endebles de lo que lo eran en el pasado.
Los centennials se identifican fuertemente con las narrativas de soledad y aislamiento y están dando forma a su propia cultura en torno la salud mental, que resulta para ellos el problema más difícil de abordar con sus seres queridos (por encima de los problemas sentimentales y los problemas financieros).
En este sentido, las marcas harían bien en tratar de procurar soporte a esta generación desde el punto de vista de la salud mental.
El activismo no es en modo alguno negociable para la Generación Z
Pese a que la salud mental es un importantísimo quebradero de cabeza para los centennials, ello no pone coto a su arrollador activismo. Una tercera parte de los jóvenes adscritos a la Generación Z afirma que la pandemia no ha hecho sino colocar bajo los focos las múltiples desigualdades en el seno de la sociedad. Y una vez constatada esta realidad, los más jóvenes no están dispuestos ni muchos a quedarse cruzados de brazos. El 69% de los centennials se dispone a pagar más por un producto en particular si la marca que está tras él parapetada apoya una causa que resulta particularmente de su interés.
La Generación Z se muestra además extraordinariamente confiada en poder procurar soluciones a los males que asolan el mundo. El 74% de los centennials cree que su generación tiene el poder de cambiar las prácticas de las marcas para mejor. Es, por lo tanto, esencial que las marcas conviertan a los más jóvenes en sus aliados para hincar el diente al cambio e invertir en un futuro mejor.
Fuente: marketingdirecto.com