El pasado mes de junio Volvo Cars firmó un acuerdo con el fabricante de acero sueco SSAB para investigar sobre la producción de aceros de alta calidad sin utilización de combustibles fósiles, dando un paso de lo más ambicioso hacia la futura descarbonización de la industria del automóvil, pues es algo que aún no se ha conseguido nunca.
El segundo fabricante que se une al objetivo de crear una cadena de suministro de acero ecológico es Mercedes-Benz, que acaba de asociarse también con la compañía sueca acerera. Ambas empresas ya están trabajando para introducir el acero verde en los vehículos lo antes posible.
Cómo se obtiene el acero verde y cómo se implementa en la cadena de suministro
Para la producción del acero verde, SSAB trabaja con el productor de mineral de hierro LKAB y la compañía eléctrica Vattenfall en la iniciativa bautizada como Hybrit, a la que se unió Volvo hace apenas dos meses y que ahora cuenta también con el apoyo de Mercedes-Benz.
Para obtener el llamado acero verde y avanzar hacia una cadena de valor sin apenas emisiones de CO₂, se pretende sustituir el carbón de coque que se empleaba tradicionalmente en la obtención del acero, por hidrógeno. Así, podría reducirse el óxido de hierro a hierro bruto, disminuyendo a su vez las emisiones nocivas a su mínimo exponente.
Tal y como ha comunicado de forma oficial el fabricante alemán, las pruebas con los primeros prototipos de carrocerías de acero libre de CO₂ están previstos para el año que viene. Ya a partir de 2026, la intención de SSAB es suministrar acero verde a escala industrial.
Los planes de Mercedes-Benz para la próxima década pasan por convertirse en una marca totalmente neutra en emisiones -lo que incluye a su red de proveedores-, a más tardar en 2039.
Por el momento, la marca ya ha anunciado que el año que viene tendrá vehículos eléctricos de batería en todos los segmentos y que a partir de 2025, sus nuevas plataformas serán solo eléctricas.
Así, y siempre que las condiciones del mercado lo permitan, con este nuevo movimiento estratégico al asociarse con SSAB, Mercedes-Benz acelera su transformación hacia un futuro libre de emisiones e impulsado por el software.
Fuente: motorpasion.com