La pandemia ha arrasado económicamente con multitud de sectores comerciales. Uno de ellos es el sector de la moda, que ha experimentado una caída considerable. Sin embargo, un reciente informe publicado por Kantar habla de una curva más plana que ha amortiguado las pérdidas en los últimos meses. La clave de esta recuperación es un cambio en el modelo de negocio que tiene que ver, primordialmente, con el auge del e-commerce y ciertas mejoras en la distribución.
Los meses de invierno aceleran la recuperación
Según datos de Kantar, desde enero hasta octubre la facturación del sector moda ha acumulado una caída del -26,4%, lo que se traduce en una pérdida de más de 4.000 millones de euros respecto al mismo periodo de 2019.
A pesar de estos preocupantes datos, el volumen de caída se ha ido reduciendo progresivamente: en mayo y julio se situaba en el -42,6%; desde julio hasta octubre el retroceso se situó en -13,8% y, finalmente, en septiembre y octubre se ha alcanzado el -7,7%, abandonando así las pérdidas de doble dígito.
En octubre, la tendencia de compra ha seguido al alza hasta alcanzar los 19,3 millones de personas que han comprado algún artículo de moda.
Diversidad en los modelos de distribución
El contexto de crisis ha enfrentado como nunca antes a dos modelos de distribución muy diferentes: el comercio tradicional multimarca y las compras online.
Por un lado, el apoyo al comercio local y la búsqueda de puntos de compra más cercano ha dado un empujón a las tiendas multimarca, que lograron entre agosto y octubre una cuota de mercado del 21,4% del valor (+1,6 puntos versus el mismo periodo de 2019).
Por otro lado, el e-commerce, el gran líder de este panorama, ha ido aumentando más y más su cuota de mercado: en agosto era del 14,4%, en septiembre del 16,5% y en octubre del 18,3%.
Rosa Pilar López, directora panel Fashion & Beauty en Kantar, explica: “Después del confinamiento, los consumidores han seguido trasladando más compras al canal online, donde, además de la comodidad y seguridad de comprar sin salir de casa, están descubriendo un amplio abanico de opciones y de nuevos operadores. Plataformas como Amazon están consiguiendo canalizar el aumento de su tráfico también hacia la moda, especialmente entre el público masculino”.
Los cambios en la distribución también están influidos por la pérdida de popularidad de las cadenas de moda low-price (como Primark), que han acumulado una pérdida de la cuota de mercado del 5%, 0,6 puntos menos que el año anterior. En paralelo, han crecido los canales de venta de los hipermercados y supermercados con un volumen de ganancia equivalente (+0,5% puntos).
En resumen, existen pocas probabilidades de que se alcancen las cifras de 2019,pues el sector aún está muy por debajo. Sin embargo, la tendencia es positiva y las “batallas” decisivas tendrán lugar en el escenario online y en los supermercados.
