La inflación mensual en Paraguay alcanzó el 0,8%, superando ampliamente las expectativas del mercado. La EVE había pronosticado un 0,5%, mientras que nuestras previsiones en Puente eran del 0,2%. Este aumento inesperado se debe, en gran parte, a los precios de los alimentos, que no solo se mantuvieron altos sino que también mostraron un comportamiento atípico.
En los primeros meses del año, habíamos anticipado posibles alzas en los precios de los alimentos debido a factores climáticos, aunque su impacto se dio más tarde de lo previsto. Pese a las sorpresas recientes, las proyecciones inflacionarias a mediano y largo plazo no se han alterado, manteniéndose dentro del objetivo del Banco Central del Paraguay para finales de 2024 y 2025.
La inflación SAE (excluyendo alimentos, combustibles y tarifas) fue del 0,3%, coincidiendo con nuestras expectativas. Anualmente, la inflación SAE se situó en el 3,5%, por debajo del rango objetivo del BCP, lo que sugiere una moderación de los efectos inflacionarios anteriores.
Aunque previmos que la lenta reducción de la TPM podría disminuir la inflación SAE, una posible depreciación del PYG/USD podría compensar estos efectos, manteniendo la inflación SAE dentro del rango meta al cierre del año.
